![]() |
Pixabay |
Devocional Diario - Biblia para vivir
Jeremías 1:5 (RVR1960) Antes que te formara en el vientre te conocí, y antes que nacieras te santifiqué, te di por profeta a las naciones.
¿Alguna vez se ha preguntado por qué está aquí?
No se trata solo de saber por qué existimos, sino de descubrir para qué fuimos creados. Porque hay algo dentro de nosotros que no se conforma con simplemente vivir. Hay un anhelo de propósito, de significado, de sentido.
El hombre puede pasar toda una vida buscando respuestas. Buscando un lugar donde encajar, una razón para levantarse cada mañana. Algunos buscan llenar ese vacío en el reconocimiento, en el amor de otras personas, en el éxito o en la aceptación del mundo. Pero nada llena el alma como saber para qué fuimos creados.
Usted no nació por casualidad. Nació por elección divina. No importa cómo llegó a este mundo ni cuáles han sido sus circunstancias, usted está aquí porque tiene un destino.
Él tiene un propósito para usted. Un propósito único. Que solo Él sabe sobre usted.
¿Alguna vez ha notado que todo en la vida parece venir con un manual de instrucciones? Desde un juguete hasta un electrodoméstico, todo tiene una guía que nos dice cómo usarlo correctamente. ¿Y nosotros? ¿Acaso no tendríamos también un manual que revele para qué fuimos creados?
La buena noticia es que sí lo tenemos: la Biblia. Ella no solo es un libro de reglas o historias antiguas. Es el manual del Creador, diseñado específicamente para nosotros, los seres humanos. En ella encontramos dirección, propósito, identidad… y una misión.
Pero muchas veces la guardamos en un estante, sin abrirla, sin dejarnos transformar por su mensaje. Y así, andamos perdidos, sin saber para qué fuimos hechos.
¿Cuál es su propósito en la vida? ¿Puede responder esta pregunta?
Contar con esa información invaluable le da sentido a todo. Pero sin acercarse a Él, ¿cómo podrá saber para qué fue creado?
Si aún no le ha abierto su corazón a Cristo, hoy es el día. Escuche esto: Dios lo ama. Y usted puede descubrir mucho más de lo que esta vida le ofrece si le rinde su corazón a Jesús.
Permita que Él lo convierta en una nueva criatura. Déjese guiar por aquel que lo conoció antes de nacer y que desde entonces tiene una misión para usted.
Él no lo creó al azar. Lo creó con propósito.
Y aunque usted haya caminado lejos, Él sigue llamándolo… no solo para salvarlo, sino para usarlo.
---
Oremos: Señor, si hoy hay alguien que siente tu voz llamando su corazón, y siente que su vida no tiene dirección, te pedimos que pueda levantarse y correr hacia Ti. Dile, Señor: “Recibe mi corazón, Jesús. Límpiame de mis pecados. Conviérteme en una nueva criatura. Quiero vivir para Ti, descubrir tu propósito y cumplir la misión que has tenido para mí desde antes de nacer”. En Tu nombre, amén.
Temas:
Devocional